TERAPIA CRANEO SACRAL, Una técnica sutil pero sumamente efectiva

“El objetivo del médico debería ser encontrar la salud.
Cualquiera puede encontrar la enfermedad”

Dr. A.T. Still

Desde hace 40 años el Dr. John E. Upledger se ha dedicado a la investigación y difusión de la Terapia Cráneo Sacral, para mejorar el funcionamiento corporal, aliviar dolores y disfunciones. En 1970, siguiendo los trabajos del osteópata William Sutherland, y trabajando en la Universidad Estatal de Michigan pudo verificar, junto a un equipo de anatomistas, fisiólogos, biofísicos y bioingenieros,  la influencia de la terapia en el sistema cráneo sacral.  

De las comprobaciones científicas alcanzadas, Upledger crea la Terapia Cráneo Sacral tal como la conocemos hoy.

En 1985 se establece el Upledger Institute, Inc ®, Clínica y Centro de Recursos, fundada para enseñar los beneficios de la TCS.

El practicante, usa un toque sumamente leve (habitualmente menor al peso de una moneda). Este toque le permite encontrar desequilibrios y restricciones en el sistema cráneo sacral, a través de “escuchar” el flujo del líquido cerebroespinal. Cuando se detecta algo inusual, el terapeuta suele usar suaves toques que liberan el área en cuestión y disipan la presión restrictiva que afectan al sistema nervioso central. Desde fuera parece que no ocurre gran cosa durante un tratamiento cráneo sacral. Sin embargo, la aplicación de habilidades sutiles puede producir muchas cosas a nivel fisiológico profundo. En el trabajo con TCS pueden usarse muchos planteamientos diferentes, pero todos ellos tienen una cosa en común: todos trabajan con las fuerzas esenciales de salud que se encuentran dentro del paciente o receptor. La principal intención del tratamiento es encontrar, apoyar y facilitar estas expresiones de salud.
Los efectos positivos de la TCS son en gran parte realizados a través de la actividad de auto corrección natural del organismo. La forma de trabajo induce a las fuerzas hidráulicas inherentes al sistema cráneo sacral a mejorar y fortalecer su propia habilidad de respuesta auto correctiva.

La Terapia Cráneo Sacral puede utilizarse sola o en conjunto con otro tipo de método terapéutico. Cada sesión puede durar entre 15 minutos o incluso más de una hora.

La TCS tiene muchas aplicaciones y de un universo muy diverso. Entre tantas, podemos señalar:
Dolores de cabeza, migrañas, sinusitis, neuralgias, parálisis facial, asma y bronquitis, dolores crónicos de cuello y nuca, dolores lumbares, ciática y sacro, stress y tensión, dolores articulares, hernias y tensión muscular, dificultades en la coordinación motora, autismo, disfunciones de recién nacidos y niños, lesiones de traumatismos craneanos y medulares, fatiga crónica, diabetes, disfunciones de la articulación temporomandibular, escoliosis, lordosis, cifosis, disfunciones del sistema nervioso central, ansiedad, depresión, insomnio, problemas digestivos, dificultades de aprendizaje, déficit de atención, hiperactividad, stress post-traumático, lesiones deportivas, dificultades emocionales y otras condiciones.

Recordemos que la TCS estimula la respuesta de autosanación y equilibrio en el organismo; por esa razón se usa en todo el mundo como una terapia sumamente efectiva y casi sin contraindicaciones.
A este respecto, solamente está contraindicado TCS en: primer trimestre del embarazo, hidrocefalia, fractura o trauma craneal reciente, aneurisma cerebral, ictus apoplético y algunos tipos de cáncer en la cabeza.

“Cuando la continuidad humana mente-emoción-cuerpo se alinea con el orden intrínseco de la vida, se abre una vía para la liberación de un poder inmenso”
Michael Burghley

 

 

 

 

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